"Si
una de esas mariposas, por ejemplo, quisiera concentrar su voluntad
sobre una estrella, o algo por el estilo, no podría hacerlo. Así, ni lo
intenta siquiera. Elige como objetivo sólo lo que tiene sentido y valor
para ella, algo que necesita, algo que le es imprescindible. Por eso
logra lo increíble; desarrolla un fantástico sexto sentido, que ningún
animal excepto ella posee."
Pensando sobre lo que dice Herman Hesse:
Siempre me ha gustado observar.
Cuando era niña, mis padres me recordaban la mala educación que era
quedarse viendo a un individuo. Yo no lo podía evitar. Francamente,
encontré muy pronto una fascinación por conocer más sobre una persona
con tan sólo observarla, que lo que ella podría saber de sí misma.
También podemos ser como las mariposas de Hesse: observamos y nos
concentramos para que aquél otro ser... haga lo que tú piensas, y de
pronto...te voltee a ver.
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